Casa Goya

Cuando esta familia nos llamó para reformar su casa, nos pidieron algo poco habitual “Queremos que la cocina conviva con el salón, incluso estamos a dispuestos a perder la terraza si eso fuera necesario, a penas la usamos y notamos que el salón es muy pequeño”. Así empezó la transformación de esta vivienda en la que decidimos unificar toda la zona de día para que se convirtiera en un auténtico espacio para ser vivido y disfrutado.

Algo que nos importaba mucho, era que esta amplitud que con la nueva distribución se iba a generar nos permitiera seguir teniendo un orden visual entre la zona de recibidor-cocina-salón y comedor, además de tratar sacar jugo a los espacios dotándoles de mayor capacidad.

Por ese motivo, destinamos las dos paredes más largas a todo el equipamiento y ordenación: Por un lado, junto al recibidor, implantamos todo el sistema de cocina y muebles columna, dejando en la zona central del espacio de día una isla que unía la otra parte de cocina con el comedor, y el resto de la estancia se convirtió en un gran salón circular con una librería de fondo, de manera que todos los espacios estuvieran bañados por la luz natural que entraba de la cristalera Sur.

Siguiendo el estilo alegre y atemporal de la zona de día, planteamos el equipamiento y decoración del dormitorio y vestidor, combinando materiales naturales y tejido suaves con colores naturales.

 El punto más sobrio y elegante se lo llevó el baño principal, dónde el azul noche nos invita al relax, sin perder el toque más desenfadado que respira toda la casa con un suelo hidráulico con mucha personalidad que dota de gran personalidad a esta estancia.